¿De verdad es necesario complementar el inglés del colegio con clases extraescolares? La niñez y la adolescencia son etapas ideales para el aprendizaje de idiomas debido a la plasticidad cerebral, que facilita la adquisición de nuevas lenguas de manera más natural y rápida. Por ello, complementar las clases de inglés del colegio con clases particulares en estas etapas no solo optimiza el aprendizaje del inglés, sino que también prepara a los niños y jóvenes para futuros retos académicos y profesionales.
Así funciona la plasticidad cerebral en los niños
La plasticidad cerebral es la capacidad que tiene el cerebro para adaptarse y reorganizarse en respuesta a experiencias nuevas, especialmente durante la infancia. En los niños, esta plasticidad es particularmente pronunciada, lo que les permite aprender de manera rápida y eficiente. Durante los primeros años de vida, el cerebro está en su fase más flexible 🧠🧽, creando y fortaleciendo conexiones neuronales a un ritmo impresionante. Esto es lo que facilita que los niños adquieran habilidades cognitivas, motoras y lingüísticas con mayor facilidad que los adultos.
A medida que los niños exploran su entorno, sus cerebros están constantemente formando nuevas sinapsis y ajustando las redes neuronales para mejorar el aprendizaje. Esta plasticidad no solo les permite aprender idiomas o nuevas habilidades rápidamente, sino también recuperarse de lesiones o dificultades tempranas. Aunque la plasticidad cerebral persiste a lo largo de la vida, es en la infancia cuando está en su punto máximo, haciendo que esta etapa sea clave para el desarrollo de habilidades cognitivas y el aprendizaje.
A por todas con el inglés desde la infancia
Las clases de inglés en el colegio son fundamentales para que los más pequeños tengan una primera toma de contacto con el idioma que, evidentemente, irá subiendo de nivel a medida que avancen en los cursos escolares. Sin embargo, pueden verse afectadas por ciertas limitaciones como el tiempo dedicado a cada lección y la cantidad de alumnos en el aula. Estas limitaciones pueden hacer que no todos los estudiantes reciban la atención personalizada que necesitan o que no se profundice lo suficiente en algunos temas.
Por eso, complementar con clases particulares se vuelve una opción beneficiosa, ya que permiten trabajar de manera más enfocada en las necesidades de cada estudiante y mejorar su nivel de inglés. En clases particulares, se puede dedicar más tiempo a resolver dudas, practicar habilidades específicas y avanzar al ritmo adecuado para cada niño. Además, en grupos más reducidos, los alumnos tienen más oportunidades de interactuar, participar y mejorar su comprensión del idioma de manera más efectiva.
En definitiva: las clases adicionales de inglés, sin duda, potencian el aprendizaje ya adquirido en el colegio y proporcionan un enfoque más individualizado, lo que permite mejorar el nivel de inglés de los niños, especialmente cuando son impartidas por profesores nativos, en grupos reducidos y personalizadas. Así son los cursos anuales de inglés de St. George’s English Academy.
¿Cómo deben ser las clases extraescolares de inglés?
Las clases particulares con profesores nativos aportan un valor añadido incomparable al inglés del colegio porque estos no solo controlan el idioma a la perfección, sino que también transmiten la pronunciación correcta, las expresiones idiomáticas y la comprensión cultural, elementos esenciales para un dominio completo del inglés 👌. La inmersión en el idioma con un hablante nativo facilita una adquisición más natural y efectiva del inglés, consiguiendo que los estudiantes desarrollen un acento más auténtico y una mayor fluidez.
Asimismo, las clases extraescolares permiten un enfoque personalizado que se adapta a las necesidades y al ritmo de aprendizaje de cada estudiante. Los profesores particulares pueden identificar y trabajar específicamente en las áreas de dificultad, así como potenciar las fortalezas de los alumnos. Este tipo de atención individualizada asegura que los estudiantes no solo comprendan mejor el material, sino que también desarrollen una mayor confianza en su uso del inglés.
Además, las clases en grupos reducidos proporcionan un entorno de aprendizaje más interactivo y colaborativo. Con menos estudiantes por clase, cada alumno tiene más oportunidades de participar activamente, hacer preguntas y recibir retroalimentación inmediata. Este formato promueve un aprendizaje más dinámico y efectivo, donde cada estudiante se siente valorado y motivado. ¡A los niños les encanta ir a clase!
El método exclusivo de St. George
En St. George’s English Academy hemos desarrollado un método propio y materiales específicos diseñados para maximizar el aprendizaje. El método se basa en las últimas investigaciones en adquisición de idiomas, integrando tecnología interactiva y técnicas pedagógicas innovadoras. Los materiales específicos creados por el equipo de expertos de St. George aseguran que cada lección sea relevante, atractiva y efectiva.
En definitiva, invertir en clases particulares de inglés es una decisión estratégica que puede marcar una gran diferencia en la competencia lingüística de niños y adolescentes. En St. George’s English Academy aún tenemos abierto el plazo de matriculación para el nuevo curso que empezará el próximo 28 de septiembre. Te esperamos para contarte detalles y resolverte dudas en nuestras academias de inglés en Bilbao y Leioa.